lunes, 12 de noviembre de 2012

Árboles con historia – El algarrobo de Borges:

En el cementerio del Convento de Santo Domingo en Vilmer, Santiago del Estero, se levanta un añoso algarrobo (Prosopis). El árbol fue testigo del fusilamiento de Juan Francisco Borges el 1 de enero de 1817. Borges fue fusilado por orden de Manuel Belgrano en cumplimiento de un decreto del Congreso de Tucumán, ya que Borges había proclamado la autonomía de la provincia y se había autoproclamado gobernador, en rechazo a las medidas anti autonomistas del Congreso de Tucumán. Años más tarde fue reconocido como precursor de la autonomía de Santiago del Estero y como uno de los héroes provinciales.
 

 

domingo, 4 de noviembre de 2012


Árboles con historia – El naranjo de San Francisco Solano:

En la ciudad de La Rioja se encuentra  el convento de San Francisco, ubicado en las calles 25 de Mayo y Bazán y Bustos. Allí se puede visitar la celda que fue ocupada por San Francisco Solano en el siglo XVI y un naranjo plantado por el Santo misionero en su llegada a La Rioja en 1.592. El histórico árbol se conserva seco y protegido por una estructura de vidrio.

San Francisco Solano era un fraile español, llegado a Perú en 1584. Desde Lima recorrió 700 leguas a pie hasta llegar al antiguo Tucumán, donde llevó a cabo gran parte de su apostolado misionero. Visitó varias ciudades como Santiago del Estero, Córdoba y La Rioja, donde convirtió indígenas y edificó templos.




 

domingo, 28 de octubre de 2012


Árboles con historia – El sauce llorón de El Plumerillo:

 

En el Campo de El Plumerillo en el Departamento de Las Heras en la provincia de Mendoza se encuentra un histórico sauce llorón (Salix babylonica), uno de los más antiguos del país. Según dice la tradición, bajo la sombra del venerable árbol se sentaron a conversar y tomar mate San Martín y Bernardo O´Higgins. Desde 1914 el sauce luce una placa de la Sociedad Forestal Argentina con la siguiente inscripción: sauce histórico que dio sombra en los años 1814 y 1817 a los generales San Martín y O’Higgins.


 

 
 
 
 

domingo, 21 de octubre de 2012


Árboles con historia – El eucalipto de Sarmiento:

En la quinta Lanusse (Punta Chica, San Fernando) existía un eucalipto (Eucaliptus globulus) que provenía de las primeras semillas introducidas en el país y distribuidas por pedido de Domingo Faustino Sarmiento.

El trámite para la declaración del eucalipto como Árbol Histórico se inició el 25 de agosto de 1958, firmado por Alberto Palcos, que presidía el Instituto Sarmiento de Sociología e Historia.

Pasaron los años, y quizá por su emplazamiento en propiedad privada, nadie se ocupó del árbol.

El 12 de febrero de 1969, una carta de lectores en el diario La Prensa firmada por el vecino H. Resia, de San Fernando, reavivó la cuestión. El lector expresaba su asombro debido a que el árbol histórico desde hacía aproximadamente seis años ya no estaba en pie, que se veía el inmenso tronco destrozado y quemado en partes y que la placa que había sido colocada para conmemorar su centenario no estaba.

El 19 de febrero el agrimensor M. J. Sackmann, quien en 1962 había remitido una carta al diario,  que no había sido publicada, copió su texto en una nueva publicación. Decía que unos clientes suyos que habían adquirido la quinta Lanusse en San Fernando, le encargaron la subdivisión en lotes para su venta. La casa iba a ser demolida. El agrimensor practicó la mensura pero comenzó a estudiar alguna solución para salvar dentro del loteo al gran eucalyptus que hacía muy pocos meses el gobierno había declarado monumento histórico. Su proyecto requería el desvío de una calle, por lo que lo presentó ante las autoridades municipales y provinciales para su aprobación. Al cabo de seis u ocho meses lo consiguió, estipulándose que el árbol siguiera en pie en una pequeña plazoleta proyectada a ese efecto.
La casa, afortunadamente, se salvó por haber sido adquirida por un extranjero que decidió conservarla y restaurarla.
El agrimensor continuaba diciendo que en 1962 debió volver al terreno para su amojonamiento y entonces encontró el árbol caído, que había sido quemado en su base unos muchachones para divertirse y que además se habían robado las placas de bronce.
La Comisión Nacional de Museos y de Monumentos y Lugares Históricos respondió finalmente el 11 de julio de 1969, diciendo que ante la irremediable extinción del árbol, resolvía la eliminación del mismo del registro de los bienes declarados.
 
 
 

 

sábado, 13 de octubre de 2012


Árboles con historia – El algarrobo de Ischilín:

 

En el norte de Córdoba, en Ischilín, se encuentra la Plaza de Armas, la que fue centro de la vida civil y militar de la región por situarse en las principales vías (el Camino Real, que unía Buenos Aires con el Alto Perú) en época de la conquista y posteriormente en la etapa de la organización nacional. Allí aún permanece en pie un imponente algarrobo (Prosopis), al que se le calculan más de 700 años de edad. Debajo de sus ramas descansaron las tropas de los Generales Lamadrid, en su viaje hacia el norte, y José María Paz, en su camino al encuentro del ejército del Gobernador Bedoya.

Este árbol, testigo de tanta historia, fue declarado como Árbol Histórico Nacional a través del Decreto N° 3110 del 28 de noviembre de 1983.




 

sábado, 6 de octubre de 2012


Árboles con historia - El ombú de Perdriel:


Dos importantes hitos de nuestra historia sucedieron en un mismo lugar. Primero se llevó a cabo el Combate de Perdriel, el 1° de agosto de 1806, donde Juan Martín de Pueyrredon estuvo al mando de la milicias que fueron vencidas por un ejército británico invasor superior en todo sentido. Posteriormente en la casa de 1831, propiedad de Mariano y Victoria Pueyrredon, nacía su sobrino, el principal representante de la literatura gauchesca: José R. Hernández y Pueyrredon, el 10 de noviembre de 1834. En ambos casos un histórico ombú fue testigo de los acontecimientos.

Actualmente el lugar se conoce como Museo Histórico José Hernández – Chacra Pueyrredon. Está ubicado en Villa Ballester, en Presbítero Carballo 5042. El añoso ombú (Phytolacca dioica) se encuentra en la entrada del museo. Resistió los años y también la embestida de un rayo que quebró una de sus ramas, la cual se conserva en la actual Plaza Billinghurst.

El ombú obtuvo se Declaratoria Provincial como Árbol Histórico mediante la Resolución N° 24 del 19 de marzo de 1960 y su Declaratoria Nacional mediante Decreto N°6502 del 22 de septiembre de 1972.




 

domingo, 30 de septiembre de 2012


Árboles con historia - El manzano de Tunuyán:

En Tunuyán, Mendoza existió un árbol, un manzano, que dio sombra al descanso del General San Martín en su regreso de las Campañas de Chile y Perú desde Guayaquil y al encuentro con el Coronel Manuel de Olazábal en febrero de 1823. El Solar del Manzano Histórico de San Martín fue declarado monumento histórico por la provincia de Mendoza, el 7 de febrero de 1938. En septiembre de 1939 se realizó una consagración cívica del manzano, coincidente con la Fiesta del Árbol y previa peregrinación patriótica. Dado que los promotores mendocinos de la celebración solicitaban la adhesión y la concurrencia de la Comisión Nacional, hubo que emitir un dictamen el 26 de junio, auspiciando la conservación del manzano ante el gobierno provincial. Puede decirse que, aún cuando no prosperara su declaratoria nacional, el manzano alcanzó celebridad en la prensa de la época, tanto en Mendoza como en Buenos Aires.

El 15 de diciembre de 1947, durante una tormenta, el árbol fue destruido por una creciente.

En el lugar se erigió el monumento Retorno a la Patria, obra del escultor Luis Perlotti. Al costado del monumento se encuentra un retoño del histórico manzano. El Manzano Histórico fue declarado Lugar Histórico mediante el Decreto N° 368 del 18 de febrero de 1975.
 
 
 

 

 

 

lunes, 24 de septiembre de 2012


Árboles con historia - El olivo de Arauco:

Sobre el límite con Catamarca, en La Rioja, a 3 kilómetros de Aimogasta, en la localidad de Arauco, se alza un majestuoso olivo (Olea europaea) con interesante historia. La Sociedad Forestal Argentina señaló a dicho árbol como el último ejemplar sobreviviente de un antiguo olivar del siglo XVII. Se cree que fue plantado hace más de 400 años por el Capitán Pedro de Alvarado en su campaña de conquista y colonización por las tierras del Tucumán.

Se cuenta que en 1870 el monarca español Carlos III hizo talar todos los olivos riojanos porque temía que sus frutos desplazaran a los de la Península. Según el relato, el olivo de Arauco fue el único sobreviviente de la tala, gracias a la intervención de doña Espectación Fuente de Ávila. Gracias a éste árbol volvió a esparcirse la olivicultura en esta región de Argentina y en zonas de Chile y Perú. Por esta razón se le atribuye el epígrafe de “Padre de la Olivicultura” y es el símbolo de la identidad del pueblo.

Según algunas versiones pueblerinas, un profesor y agricultor de la provincia de Córdoba, Juan Brunnel, al recorrer la región encontró el olivo y quedó maravillado de este árbol añejo y sin dudarlo lo hizo conocer a través de fotografías.
En 1914 se colocaron placas en el Olivo de Arauco. El 4 de julio de 1946 fue declarado Árbol Histórico mediante el decreto N° 2232. El 24 de mayo de 1953 se declaró por decreto nacional Nº 7030, Día Nacional de la Olivicultura, por la simple razón que ese día, en 1591, fue el primer asentamiento español en Aimogasta y seguramente por aquellos años fue plantado el histórico árbol.  Declarado Monumento Histórico Nacional, el añoso olivo actualmente produce unos cien kilogramos de sabrosas aceitunas y se lo considera el abuelo de las aceitunas riojanas.




 

sábado, 15 de septiembre de 2012


Árboles con historia - El nogal de la finca de Saldán:


El General Don José de San Martín se instaló desde junio hasta agosto de 1814 en una finca en Saldán (a 20 km de la ciudad de Córdoba), propiedad del doctor Eduardo Pérez Bulnes, para reponer su salud.

Según cuenta la tradición, en el jardín de la estancia había un nogal y sentado a la sombra del coposo árbol, San Martín definió los pasos de su  estrategia para atacar a España y llegar al epicentro colonial, el Perú, por un camino inimaginable para la lógica. Fue allí mismo donde se dice que Don José conferenció con el Gral. Paz.

San Martín partió de Córdoba hacia Mendoza, teniendo ya trazado el plan de emancipación con el Ejército de los Andes.

El nogal (Junglans) que databa del siglo XVII fue declarado Árbol Histórico mediante el decreto N° 2232 del 4 de julio de 1946 durante la presidencia de Perón, pero con el paso del tiempo se secó.

La propiedad (Laprida 854) donde se encuentra el histórico árbol, fue adquirida por Francisco Martín Viglianti, quien colaboró para construir allí un monumento en el cual han sido colocadas placas de homenajes (en 1925 por la Sociedad Forestal Argentina, en 1938 por el Comando de la Cuarta División de Ejército, en 1939 por el Club José María Paz, etc.).
 



 
 
 

lunes, 10 de septiembre de 2012


Árboles con historia - El algarrobo de Purmamarca o Viltipoco:

En el camino que baja hacia la plaza, al costado de la iglesia del pueblo de Purmamarca de la Quebrada de Humahuaca en Jujuy, se encuentra un histórico algarrobo (Prosopis alba). Se calcula que éste debe tener una edad cercana a los 600 años, por lo que fue testigo de importante parte de la historia de Jujuy.

La memoria del pueblo conserva innumerables anécdotas que ocurrieron bajo su ramaje. Fue el lugar donde, hacia el año 1700, el cacique Viltipoco, que comandaba unos 1000 aborígenes en contra de la invasión española, acogió con un vaso de chicha al primer evangelizador castellano, el Padre Gaspar Monroy, como estrategia para acercarse al enemigo y estudiarlo antes de atacar. También se dice que bajo sus ramas Viltipoco fue sorprendido y apresado por las tropas realistas al mando de Don Francisco de Argañaraz y Murguía, mientras descansaba, víctima de una traición que determinó la derrota de los nativos. Otra de las historias de las que fue testigo el añoso árbol es la que dice que bajo su sombra, generales de los ejércitos patriotas, soñaron con la libertad americana. Como es el caso de Manuel Belgrano, cuyas tropas (Ejército del Norte) descansaron a su pie en la época de la Guerra de la Independencia (1810-1816).

Una placa al pie del árbol recoge toda su interesante historia.
 
 



 

domingo, 2 de septiembre de 2012


Árboles con historia - El ombú del Virrey Vertiz:

 

Es discutido si el Ombú (Phytolacca dioica) es una hierba gigante de aspecto arbóreo o es un árbol.

Existieron en nuestro país varios ombúes que fueron testigos de importantes hechos históricos. En esta oportunidad hablaremos del Ombú del Virrey Vertiz.

Es un antiguo ombú, testigo de nuestra historia, que se mantiene hoy en día en pie en la rotonda de la calle Gaspar Campos, en Vicente López. El añoso árbol pertenecía a la propiedad del Virrey Juan José de Vertiz y Salcedo. 

En el año 1914 se le colocó una placa de reconocimiento como árbol histórico. Al abrirse la calle Gaspar Campos se respetó al añoso ombú y se le construtó una rotonda.

Hacia mediados del siglo XX se mudó frente al árbol el conocido dibujante argentino Florencio Molina Campos, quien se constituyó en el cuidador y preservador honorario de aquél ombú. 

Vertiz nació en 1719 en Mérida, Yucatán. Fue quien en 1778 sucedió a Pedro de Cevallos como Virrey del Río de la Plata. Se casó con Deolinda de Saavedra y recibió como dote de boda la mitad de una granja a orillas del río que poseía su suegro, donde estaba el famoso ombú. Tres construcciones del año 1775 del Arquitecto Contucci, que hoy en día aún existen,  se levantaban en la propiedad. Una de ellas es la casa de Gaspar Campos 121, que en aquel entonces era la Capilla. 

Al morir Deolinda, Vertiz decidió ingresar  a la Masonería y se instaló en la capilla. Mandó a construir el segundo piso y la torre para usar como casa de fin de semana.
 
 


 

viernes, 31 de agosto de 2012

Árboles con historia - El ceibo de Jujuy o de Alvear:

En la plaza Lavalle de ciudad de Buenos Aires, en la esquina de Tucumán y Talcahuano, se encuentra un histórico ceibo (Erytrina falcata) traído desde de Jujuy y plantado en 1878 por el intendente Torcuato de Alvear.
Este ceibo es originario de las Yungas, selvas de montaña en el noroeste de Argentina entre la llanura chaqueña y la árida Puna.
Hoy en día el árbol se lo ve inclinado y se encuentra deteriorado debido a su edad y a que fue atacado por hongos, por lo que se formó una gran cavidad en su tronco. Para preservarlo, sus viejas ramas están sostenidas por postes, parte de su tronco está relleno con cemento y es sometido a tratamientos especiales de mantenimiento. Es un árbol corpulento, tiene una altura de 12 m y una circunferencia de tronco de 4 m. Florece antes de echar hojas, con racimos de lindísimas flores rojas.





 
Árboles con historia - El algarrobo de Pueyrredon:

 En las barrancas de San Isidro, en el norte del Gran Buenos Aires, en la Quinta Pueyrredon (Rivera Indarte 48) se encuentra el llamado “Algarrobo de Pueyrredon”, debajo del cual –según se cuenta– San Martín y Pueyrredon planificaron la libertad de América.
La casona de la quinta tuvo varios dueños, pero su principal residente fue Juan Martín de Pueyrredon. También fue habitada por Roque Sáenz Peña durante su presidencia (1910-1914). Fue construida en 1790 y sus habitaciones se distribuyen en torno a un amplio patio central que contiene un aljibe y canteros con naranjos. Desde el patio se observa el atelier que construyó el arquitecto y notable pintor Prilidiano Pueyrredon (hijo de Juan Martín), quien heredó la chacra y le realizó cambios y ampliaciones. Desde 1941 el predio pertenece al patrimonio municipal de San Isidro y es conocido como el Museo Pueyrredon.
El algarrobo blanco (Prosopis alba) es un árbol típico del talar, bosque que cubría las barrancas del partido. Esta especie está en peligro de extinción en la provincia de Buenos Aires. Es soporte para distintas plantas epífitas como claveles del aire y la orquídea flor de patito que se apoyan sobre sus ramas. También es posible observar la presencia de líquenes que son asociaciones entre hongos y algas. Es decir, una simbiosis y nos sirve como bioindicador, ya que su presencia es sinónimo de buena calidad del aire.
Desde 1915 el histórico árbol de la Quinta Pueyrredon lleva una placa en la cual se consigna que, a su pie, mantuvieron largas entrevistas los generales Pueyrredón y San Martín. El ejemplar fue declarado Árbol Histórico por la Comisión Nacional de Museos y Lugares Históricos en 1946. Se calcula que tiene más de 330 años y está en perfecto estado sanitario.
A dicho árbol Victoria Ocampo lo hizo protagonista de un libro: Habla el algarrobo.
El 23 de septiembre de 2011, por Decreto Nº 2.366, el Intendente de San Isidro declaró Monumento Natural Municipal al algarrobo blanco de la Quinta Pueyrredon junto con otros siete árboles de gran valor para el partido.
En la ciudad de Buenos Aires, en Plaza Pueyrredon (popularmente conocida como Plaza Flores) se levanta un retoño del Algarrobo de Pueyrredon.
Juan Martín de Pueyrredon nació en Buenos Aires el 18 de diciembre de 1777 y murrió el 13 de marzo de 1850 en su casa de San Isidro. Era hijo del comerciante francés Don Juan Martín de Pueyrredon y de Rita O’Dogan, de familia porteña de origen irlandés.
Inicialmente se destacó en la historia nacional por formar con gauchos un escuadrón de caballería (Regimiento de los Húsares de Pueyrredon) para unirse a Santiago de Liniers en la lucha contra las invasiones inglesas en 1806. También sobresalió por ser designado por la Primera Junta en 1810 como encargado de la gobernación de Córdoba y luego de Chiquisaca En 1812 fue miembro del Primer Triunvirato. En septiembre de 1815 fue nombrado diputado por la provincia de San Luis ante el Congreso de Tucumán. Pocos meses después fue elegido Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata por el Congreso que declaró la Independencia. Por ese entonces Pueyrredon tenía un solo objetivo: que el General San Martin y su ejército cruzaran los Andes para liberar América de los españoles. En su Chacra de de San Isidro, en repetidas ocasiones y debajo del algarrobo que mira la barranca, con la participación de Tomás Guido se tomaron las decisiones estratégicas del cruce de los Andes (1818).
Tras un tiempo de exilio, Pueyrredon regresó al país en 1821 y dividió su tiempo entre sus propiedades de la ciudad y la Chacra de San Isidro. En esta última buscó paz y tranquilidad en los jardines. Sobre las barrancas del río y rodeado de la flora autóctona, se dedicó a la horticultura: plantaba árboles y cultivaba flores, convirtiendo el entorno de la casa en un maravilloso jardín.
 





 

sábado, 11 de agosto de 2012


Árboles con historia - El pino de San Lorenzo:
El 17 de agosto se conmemora en Argentina la muerte del General José de San Martín (1778-1850). San Martín es uno de los más importantes próceres argentinos por ser el libertador de Argentina, Chile  y Perú y ser el organizador del famoso Regimiento de Granaderos a Caballo, el que tuvo su bautismo de fuego en la Batalla de San Lorenzo.

En la ciudad de San Lorenzo, a pocos kilómetros de Rosario, en la provincia de Santa Fe, se levanta el convento franciscano de San Carlos. Desde allí, el 3 de febrero de 1813,  partió al ataque de los realistas españoles el Regimiento de Granaderos a Caballo, conducido en ese entonces por el Cnel. San Martín. En la batalla de San Lorenzo el caballo de San Martín cayó muerto por un cañonazo y el Coronel fue salvado del ataque enemigo por el granadero Baigorria. El Sargento Cabral fue herido de muerte al intentar rescatar a San Martín caído con su caballo. Finalmente con un ataque del Capitán Bermúdez los Granaderos logran la victoria de la batalla.

Luego del enfrentamiento San Martín escribió bajo la sombra de un pino (Pinus pinea), ubicado en el huerto de la parte posterior del convento de San Carlos, el parte del combate.

Tanto el histórico pino como los demás árboles fueron plantados por los franciscanos hacia 1790. A mediados del siglo pasado el estado del árbol era preocupante, por lo que el Gobierno Nacional encomendó al científico japonés Miyamoto Katsusaburo la conservación del árbol. En 1946 fue declarado Árbol Histórico por decreto del Poder Ejecutivo nacional. Actualmente el pino de San Lorenzo se encuentra en buen estado circundado por una verja.

 El convento, ubicado junto al campo de batalla, hoy en día es un museo en el que se pueden visitar el comedor que funcionó como hospital para los heridos atendidos por el Dr. Argerich, la habitación utilizada por San Martín y varios objetos de guerra, entre otras cosas.

En la ciudad de Buenos Aires, en lo alto de la Plaza Barrancas de Belgrano, se encuentra un retoño del histórico pino de San Lorenzo.





domingo, 5 de agosto de 2012


Árboles con historia - El ombú de Caseros:

Es discutido si el Ombú (Phytolacca dioica) es una hierba gigante de aspecto arbóreo o es un árbol. Pero no hay dudas de que, a pesar de no ser nativo, es un símbolo de la llanura pampeana.

Existieron en nuestro país varios ombúes que fueron testigos de importantes hechos históricos. En esta oportunidad hablaremos del Ombú de Caseros y nos referiremos a él como árbol por el decreto que lo proclamó Árbol Histórico.

La Batalla de (Monte) Caseros tuvo lugar el 3 de febrero de 1852 en la estancia de la familia Caseros, en las afueras de Buenos Aires, cerca del palomar. El ejército de la Confederación argentina, al mando de Juan Manuel de Rosas fue derrotado por el Ejército Grande, compuesto por fuerzas de Brasil, Uruguay y de las provincias de Entre Ríos y Corrientes, liderado por el gobernador de Entre Ríos, Justo José de Urquiza, quien se encontraba alzado frente a Rosas desde el 1º de mayo de 1851, día en que lanzó el llamado Pronunciamiento de Urquiza.
El enfrentamiento comenzó a las 9 de la mañana y duró 5 horas. Habiendo sido Rosas herido de bala en el pulgar de la mano derecha, se retiró del lugar a las 14 horas.

En el Hueco de los Sauces, terreno que actualmente corresponde a la Plaza Garay, bajo la sombra de un ombú que se levantaba en el terreno, Rosas redactó sobre su rodilla con lápiz su renuncia a la Gobernación de Buenos Aires. Ésta terminaba  diciendo: “Señores Representantes: Creo haber llenado mi deber como todos los señores representantes, nuestros conciudadanos, los verdaderos federales y mis compañeros de armas. Si más no hemos hecho en el sostén sagrado de nuestra independencia, en nuestra integridad y nuestro honor, es porque no hemos podido. Permitidme, Honorables Representantes, que al despedirme de vosotros reitere el profundo agradecimiento con que os abrazo tiernamente y ruego a Dios por la gloria de V. H., de todos y cada uno de vosotros. Herido en la mano derecha y en el campo, perdonad que escriba con lápiz esta nota y de una letra trabajosa. Dios guarde a V. H.”

El ombú en cuestión fue declarado Árbol Histórico mediante el Decreto N° 3038 del 30 de enero de 1946 firmado por el presidente Farrell. Se empleó iconografía de época para validar la declaratoria, en el segundo considerando se declaraba: “observarse en los grabados litográficos que documentan la batalla y el campo en que se desarrolló, grabados cuyos dibujos se deben a un testigo ocular y que fueron publicados poco tiempo después de ocurrido aquel hecho de armas”.

Hubo una exitosa gestión de la Comisión Nacional ante la Secretaría de Aeronáutica de El Palomar, propietaria del árbol, para evitar que el trazado de nuevas pistas de aterrizaje pudiera arrasar con él.