Las piletas con mantenimiento permanente sólo requieren de una limpieza de los bordes, agregado de cloro, mantener bajo el PH y recircular el agua, por lo menos una vez por día. En el caso de piletas que no van a ser mantenidas, colocar cloro sólido en el flotante de la pileta y larvicida. Las piletas de plástico o lona deben ser desagotadas y limpiadas, cepillando bien los bordes para desprender posibles huevos de mosquitos y luego guardadas en lugares cubiertos para evitar la acumulación de agua de lluvia.